Aceite de oliva
Tocino de Jamón (opcional)
1 cebolla chalota pequeña
1 diente de ajo
100 gr de setas de temporada
(en este caso he usado setas de cardenal)
20 cl. de vino blanco seco
1 cucharadita de miel
400 gr de tomate
2 bolas pequeñas de mozarela
4 o 5 hojas grandes de albahaca
Orégano
Nuez moscada
Pimienta negra
Perejil
La receta de hoy es bastante sencilla y conseguimos un resultado espectacular. Hemos escogido los ravioli, pero se puede hacer con cualquier tipo de pasta, fresca o seca. Otro día os contaremos como hacerla en casa, es muy fácil. ¡Espero que os guste!
Lo primero que vamos a hacer es precalentar el horno a 270º para que cuando tengamos el plato listo no tengamos que esperar. Si tu horno tarda poco en llegar a esta temperatura, enciéndelo en la mitad del proceso.
Ponemos una sartén a fuego medio y ponemos el tocino de jamón para que se vaya deshaciendo, cuando esté transparente añadimos el aceite de oliva, la cebolla picada y el ajo. Para que este no nos siente mal, le quitamos el corazón como se ve en la imagen.
Dejamos pochar a fuego medio/bajo durante 5 o 10 minutos. Añadimos la miel, dejamos que se deshaga y mezclamos con la cebolla. En este caso usamos solo la miel para anular la acidez del tomate y del vino blanco. No queremos un plato dulce, si no equilibrado.
En otra sarten salteamos las setas, cortadas en láminas, con el perejil y un poco de aceite de oliva. Las reservamos.
Por otro lado vamos a preparar el tomate. Podemos usar triturado o natural. Lo picamos y escurrimos el agua con la ayuda de un colador y una cuchara. No queremos que el tomate se cueza, si no que se fría. Lo incorporamos a la sartén subiendo un poco el fuego para que tome temperatura, entonces lo dejaremos a fuego medio 8 minutos removiendo de vez en cuando. Pasado este tiempo añadimos el vino y dejamos reducir. Cuando esté listo trituramos con la batidora.
Mientras podemos hacer con el mortero un aceite de albahaca. Cortamos las hojas de esta maravillosa planta y las majamos con el mortero haciendo que suelten su jugo, añadimos un poco de aceite de oliva y seguimos majando. Lo mezclamos con la salsa triturada.
Podemos cocer la pasta al mismo tiempo que hacemos la salsa. Ponemos agua al fuego con un poco de sal, cuando empiece la hervir añadimos la pasta removemos de vez en cuando para que no se apelmace. Coceremos la pasta 2 minutos menos del tiempo recomendado para que quede 'al dente'. Al escurrir la pasta, dejaremos un poco de agua de cocción.
Sin dejar pasar ni un segundo, mezclamos con la salsa. Ponemos en una fuente una cama con las setas salteadas y añadimos la pasta. Por encima ponemos el resto de setas. Cortamos en dos partes cada bola de mozarela y ponemos encima. Ya solo queda ponerle el orégano, la nuez moscada y la pimienta por encima.
Metemos al horno precalentado a 270º, con fuerza arriba y abajo durante 2 ó 3 minutos. Queremos que la mozarela se funda, pero que no se gratine.
¡¡A comer!!
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